Ramón Carlín
Ramón Carlín era, probablemente, uno de los candidatos peor situados para convertirse en el primer ganador de la Whitbread/Volvo Ocean Race.Carlin fue un empresario mexicano que hizo su fortuna vendiendo lavadoras y que armó un proyecto formado por dos británicos, un danés, un australiano y seis mexicanos, entre los que estaban el propio Carlin, su mujer y uno de sus hijos.
Durante la regata sobrevivieron a un vuelco terrorífico. Pese a que las condiciones en aquella primera edición fueron terriblemente duras y la tripulación navegó en unas condiciones tremendas, también eran capaces de llevar una vida, aparentemente, de ‘gentlemen’ a bordo.
Butch Dalrymple-Smith, jefe de guardia durante la regata, escribía en 2010: “Nuestro cocinero (llevaban una persona a bordo exclusivamente para ello) nos servía filetes, pollo y hamburguesas durante toda la regata. El frigorífico era una bendición. Cuando un grupo de periodistas nos visitó en Ciudad del Cabo, alucinaron al ver que aún teníamos 11 latas de caviar tras haber pasado 45 días en el mar”.
Tras la regata, la reina Isabel II pidió ver a Carlin, que volvió a su país para asistir a una recepción presidencial en Acapulco y se convirtió en el navegante más famoso de México.
“El factor que marcó la diferencia para ganar fue mi barco y la tripulación”, dijo Carlín. “No tuvimos tiempo para entrenar. Mi plan consistía en conocer a la tripulación y enseñarles cómo organizar el barco durante la primera etapa, pero todos ellos demostraron ser muy buenos”.
“Lo que me enganchó fue que era una aventura, nadie sabía que camino seguir. Era la primera vez que alguien competía en una vuelta al Mundo con tripulación y la competencia era enorme”.
Carlin dirigió a su equipo de forma muy inteligente, y con mucha humildad, incluso en las duras condiciones del Océano Sur. “Fue muy, muy considerado”, dijo Dalrymple-Smith.
“Si alguien caía enfermo, él asumía su guardia nocturna. Se encargaba de secar nuestra ropa mojada si a alguno se nos olvidaba. Otros nos habrían gritado. Él no era así. Todo lo que marcó la diferencia entre el éxito y el fracaso nos conduce a Ramón”.
Ramón Carlín falleció en Ciudad de México a los 92 años.
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